Conversación ANIDAR con Olga Lucía Olaya

Conversación ANIDAR con Olga Lucía Olaya (Colombia) el 9 de noviembre de 2020 en ARQA.

> ANIDAR: https://arqa.com/anidar
> Conversación en youtube de ARQA: https://youtu.be/xqvx4acfu1Y
> Conversación en instagram de ARQA: https://www.instagram.com/tv/CIQmFTfAixa/
> Nota en ARQA: https://arqa.com/actualidad/noticias/25a-conversacion-anidar-olga-lucia-olaya-el-ejercicio-de-la-ciudadania-desde-la-primera-infancia.html
> Conversaciones ANIDAR cada lunes:https://arqa.com/agenda/charlas/ciclo-de-conversaciones-anidar-arquitectura-y-ninez.html

Conferencista y asesora de formación artística desde hace más de 35 años. Actualmente está vinculada al Programa Crea, del IDARTES – Alcaldía de Bogotá. Es subdirectora del Consejo Latinoamericano de educación por el arte- CLEA, y acompaña procesos de creación e investigación sobre la incidencia de las artes en primera infancia y en todo el ciclo vital.

Olga comentó las líneas principales de Crea Idartes - Alcaldía Mayor de Bogotá, programa de educación artística para 6-16 años (apróx.) donde ella coordina la rama de artes visuales. Decenas de artistas participan en este programa colaborando con centros educativos y profesorado enriqueciendo el ecosistema educativo-cultural de la ciudad.

Ella también habló de los avances colombianos en la educación de la Primera Infancia, generando espacios idóneos de cuidado, juego y aprendizaje para los más pequeños. Nos recordó la exposición "Colombia, país invitado" en Bienal Ludantia (Pontevedra, España, 2018) donde mostramos 31 proyectos colombianos que abordan infancia, arquitectura y educación.

Los espacios donde crece la infancia, sean hogareños o públicos, estén en grandes ciudades o en pequeños pueblos, influyen ese crecer... como influye la alimentación o el cariño que los adultos les damos. Los derechos de la infancia están escritos en tinta sobre papel y firmados por los Estados. Hay que cumplirlos para toda la infancia sin excepción, único camino al futuro próspero común.




Como dice la nota en Arqa:

Olga lleva 35 años trabajando en el mundo del arte y la educación. En la 25ª conversación ANIDAR, la invitada refirió a su experiencia “realmente ha sido una incursión de mucho compromiso con el arte y la educación desde la primera infancia y todos los ciclos de formación, no solamente la educación formal y no formal sino también dentro de las propuestas de formación continua. Desde 2012 para acá nos acercamos a todas las investigaciones que venían en forma de desarrollo, no solo por artistas sino por pedagogos y arquitectos pensando la primera infancia”.

En relación al trabajo con infancias, espacio, arte y educación en Colombia la invitada hizo referencia a la importancia de que el ejercicio de la ciudadanía empiece desde la primera infancia “hay unas preguntas instaladas desde las formas, no solamente de la oferta de formación, incluso en las apuestas arquitectónicas de parques públicos o museos ha sido activar profesionales en reconocer el ejercicio de la ciudadanía de la primera infancia. El espacio público ha significado darle vida a muchos de los proyectos que tenían antecedentes en Italia y otros países pero que en Colombia empiezan de manera contundente del 2012 para acá. Ha sido muy importante reconocimiento del ejercicio de la ciudadanía de la primera infancia”.

En estrecha vinculación con esta posibilidad de que las infancias ejerciten sus derechos ciudadanos, existe en Colombia la ley de «Cero a Siempre» que se sancionó en 2011. La invitada hizo referencia a este marco regulatorio que posibilita políticas públicas enfocadas específicamente en la primera infancia “cuando surge un proyecto de vocación de estado, donde ya no es una opción sino un derecho ganado para los niños, esta concepción de cero a siempre empezó a oponer de frente la relación del sujeto y su entorno, y los entornos donde ellos interactúan. El tema de familia, el tema de espacio público, el tema escolar, empezó a generar proyectos de investigación. La ley reforzó, movilizó, pero también encontró recursos de inversión. Proyectos como Buen Comienzo en Medellín, o Tejedores de Vida en Bogotá, que se desarrollan en ciudades, generaban en las movilizaciones de inversión pública una visibilización del ejercicio de los derechos de los niños que no tenía precedente en el país. Esa ley de cero a siempre ha sido la posibilidad de poder darle continuidad a este marco de desarrollo de derechos para la primera infancia para luego seguir trabajando en los derechos de niños y jóvenes. El avanzar en la primera infancia implica que esa continuidad del ciclo vital sea observable para niños y jóvenes”.